Las posibilidades de que el príncipe Carlos conozca en persona a su nieta más pequeña, Lilibet, aumentaron significativamente este lunes tras el anunció que dio la Clarence House, residencia oficial del príncipe de Gales y su esposa, Camila Parker.
A través de sus redes sociales se informó que el próximo rey de Inglaterra y la reina consorte viajarán el próximo mes de mayo a Canadá como parte de la celebración del Jubileo de Platino de Isabel II.
"Para conmemorar el Jubileo de Platino de Su Majestad la Reina, el Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornualles visitarán Canadá en mayo. Sus Altezas Reales se reunirán con las comunidades en Terranova y Labrador, Ottawa y Territorios del Noroeste. El Príncipe y la Duquesa esperan regresar a Canadá luego de su última visita en 2017", informó la Clarence House junto a una serie de fotografías de los monarcas.
Esta noticia abre las esperanzas de que Carlos y Camila se puedan reunir con el príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle, para conocer a Lilibet, la hija pequeña de los duques de Sussex que nació en Estados Unidos en junio y que sólo ha logrado ver en persona Eugenia de York, la prima de Harry, que lo visitó en California el pasado mes de febrero.
Aunque hay una gran distancia entre Canadá y Montecito, lugar donde residen los Sussex desde que se mudaron al país natal de la ex actriz de Suits, es más pertinente un vuelo para que la reunión entre Harry y su padre pueda darse. De ser así, sería la primera vez que el príncipe Carlos conocerá a Lilibet.
Los duques de Sussex se negaron a regresar a Inglaterra para el servicio conmemorativo del duque de Edimburgo que se realizó para recordarlo a un año de su muerte. La excusa de Harry fue la falta de seguridad para su familia, lo cual fue severamente criticado ya que próximamente viajará a los Países Bajos para ser el anfitrión de los Juegos Invictus, un hecho que se le recrimina ya que el servicio de su abuelo era una de las fechas más significativas para la reina Isabel.