El príncipe Harry llegó a Japón con su amigo polista Nacho Figueras y sin su esposa, Meghan Markle. Y la verdad es que no se le veía triste ni afectado. Por el contrario, se le vio confiado y feliz, de acuerdo con lo que informa un experto en lenguaje corporal.
Los gestos reveladores del hijo menor del Rey Carlos III durante su aparición en Asia sugieren que siente “alegría absoluta”. Harry subió al escenario en la Cumbre de valores deportivos de ISPS y se unió a un panel para hablar sobre deporte, comunidad y filantropía. Estaba sonriente y disfrutaba de cada instante.
Luego se le vio riendo durante la conversación con el panel, donde compartió con Nacho Figueras. Juntos participarán en un partido benéfico de polo el fin de semana en Singapur.
El experto en lenguaje corporal Darren Stanton explicó que “vimos a Harry acompañado por el fundador de ISPS Handa, Haruhisa Handa, el ex jugador de rugby de Nueva Zelanda Dan Carter y Nacho Figueras en el escenario de la cumbre. Se vio a Harry sonriendo y riendo, lo que demuestra que sintió una alegría absoluta en ese momento en el tiempo”.
“Tenía la boca abierta y los ojos muy abiertos, y ese es el epítome de la felicidad genuina. Se estaba divirtiendo y se sentía a gusto sin presión ni drama. Realmente disfrutaba estar en ese entorno”.