Tras la muerte de la Reina Isabel II, muchos secretos han salido a la luz, uno de ellos fue el deseo que tenía la monarca de solucionar los disgustos con su nieto, el príncipe Harry (38), y su esposa, Meghan Markle (41), luego de que estos decidieron renunciar a sus deberes reales y mudarse a Estados Unidos.
De acuerdo con lo reseñado por el medio británico Daily Mail, la reina adoró al duque de Sussex hasta el día de su muerte, por lo que le hubiese gustado arreglar las cosas con él, según afirmó el historiador real, Robert Hardman, quien además aseguró que Isabel II fue “uno de los conductos entre Windsor y California”.
“Su deseo más querido habría sido conectar la brecha dentro de la familia desde que Harry y Meghan anunciaron que se retirarían de sus deberes reales en 2020”, declaró el también autor de Queen of Our Times: The Life of Elizabeth II para la revista People.
Las relaciones entre el duque y la duquesa de Sussex con otros miembros de la familia real se han vuelto un poco tensas desde que Harry y Meghan se mudaron a California poco antes de la pandemia de coronavirus, por lo que generó una división en la familia.
Sin embargo, pese a la ruptura familiar, ha habido algunos indicios de una posible reconciliación entre ellos después del fallecimiento de Su Majestad, pues en el primer discurso del Rey Carlos III (73) expresó su amor por su hijo menor y su nuera. “También quiero expresar mi amor por Harry y Meghan mientras continúan construyendo sus vidas en el extranjero”, comentó el nuevo monarca.
Dichas palabras fueron tomadas por algunos fanáticos de la realeza como una ofrenda de paz para el duque y la duquesa de Sussex. Además, Carlos también permitió que Harry usara su uniforme militar durante una vigilia el sábado pasado junto con los otros nietos de la reina, en la que custodiaron su ataúd en Westminster Hall, para poder presentar sus respetos a su abuela.
Las declaraciones de Robert Hardman se producen después de que un nuevo y explosivo libro de la realeza británica afirmara que Isabel II estaba "herida" por la decisión de Harry y Meghan de abandonar sus deberes dentro de la monarquía.