Mucho se dijo sobre la prohibición que tenía el príncipe Harry (38) de usar su uniforme militar durante los eventos del servicio funerario de la reina Isabel II. El hijo menor del rey Carlos III (73) recibió un permiso especial del monarca para poder vestir su Blues and Royals en la vigilia que realizaron ochos de los nietos de Su Majestad; sin embargo, el duque de Sussex quedó devastado debido a una cruel imposición.
Según diversos reportes, el esposo de Meghan Markle (41) quedó desecho cuando le fueron retiradas las iniciales de la reina “ER” del hombro de su uniforme militar, de hecho aseguran que Harry quería usar un traje para evitar la vergüenza mientras hacía la guardia de honor al féretro de su abuela en Westminster Hall.
El príncipe William, primero en la línea de sucesión a la corona inglesa, encabezó junto con Harry la vigilia, ambos vestidos de militares, a ellos se unieron sus primos Zara Tindall y Peter Phillips, hijos de la princesa Ana; las princesas Beatriz y Eugenia, hijas del príncipe Andrés y Lady Louise Windsor y su hermano, el vizconde Severn, hijo del príncipe Eduardo.
Aunque Harry perteneció al ejército, incluso estuvo en servicio durante en dos ocasiones en Afganistán, no tenía permitido usar su traje militar luego de que renunció a sus labores reales en 2021 y de que se mudara a Estados Unidos junto a su esposa y su primogénito Archie.
El rey Carlos III le concedió permiso especial para que pudiera vestir como dicta el protocolo pero Harry quedó desconsolado cuando descubrió que las iniciales de su abuela no estaban en el hombro de su uniforme, mismas que sí lucieron en el saco del príncipe de Gales.
Las iniciales “ER” tradicionalmente las usan aquellos que están “al servicio” del monarca, lo que significaría que esto se debe estrictamente a las normas de vestimenta y no un desaire directo del príncipe. “Está desconsolado. Al quitar las iniciales de su abuela sintió que fue muy intencional”, indicó un amigo de Harry al periódico The Sunday Times.