Pese a que han pasado varios días desde que Carlos III (74) se coronó como el nuevo rey de Inglaterra, hasta ahora han salido a relucir parte de las molestias que sintió el monarca con varios miembros de la realeza británica, pues lograr la perfección, incluso en uno de los eventos más grandes, es una labor complicada.
Aunque todos centraron su atención en el histórico evento de Reino Unido y seguían con detalle los movimientos de los soberanos y demás integrantes de la realeza, un experto lector de labios captó el disgusto de Carlos mientras se encontraba en su carroza y estuvo relacionada con la tardía llegada de los príncipes de Gales a la Abadía de Westminster.
De acuerdo con el cronograma de la ceremonia, el príncipe William (40), Kate Middleton (41) y los dos hijos menores de ambos debían ser los penúltimos miembros de la casa real en llegar al evento antes que los reyes, luego de que ya lo hubieran hecho los invitados, diplomáticos, miembros de otras casas reales y sus parientes de la realeza.
Pese a lo planeado, cuando el rey llegó en la carroza Jubileo de Diamante, junto con la reina Camila (75), se encontró con la sorpresa de que el heredero al trono y su familia no habían llegado, por lo que tuvo que esperar varios minutos en el vehículo.
Carlos III, que se ha caracterizado por su impaciencia y mal carácter, fue captado por las cámaras preocupado y haciéndole comentarios a su esposa, los cuales fueron revelados por un experto en lectura de los labios, que dice haber descifrado las frases del rey. “Nunca podemos estar a tiempo. Siempre hay algo. Eso es aburrido”, aseguró el especialista al medio Daily Star de lo que pudo haber dicho el monarca.
Sin embargo, no fue el único disgusto de Carlos en el día más importante de su vida, pues el rey también habría sentido una gran decepción al ver que el príncipe Harry (38) salió corriendo a California una vez terminó la ceremonia de coronación.