El Príncipe William y Kate Middleton decidieron que su hijo mayor, el Príncipe George, podrá hacer un alto en la tradición de varios siglos de la familia real británica y no servir obligatoriamente en las fuerzas armadas del Reino Unido.
La única forma en que el hijo mayor de los príncipes de Gales esté en una rama castrense es que él exprese el deseo de hacerlo explícitamente. Con ello, se interrumpiría una larga tradición que tuvo a su abuelo Carlos en la Marina Real y a su padre, William, en la Real Fuerza Aérea.
Según el historiador Dominic Sandbrook, la tradición está cambiando dentro de La Firma, y los futuros herederos y otros miembros de la realeza podrían incluso asumir roles civiles.
Un amigo del príncipe William dijo que Kate y el futuro rey no se interpondrán en la decisión de George sobre su profesión y su pasión en la vida. “En teoría, no hay nada que impida que George siga una carrera como astronauta, por ejemplo, si eso es lo que él quiere, y luego convertirse en Rey más tarde”, explicó.
Agregó que “las reglas son diferentes ahora. No necesariamente tendría que seguir la vieja fórmula de ir al ejército y luego a la vida real. Entonces, ¿Charlotte podría calificar como doctora, por ejemplo? No veo por qué no”. De esta manera, al segundo en la línea del trono se le permitirá saltarse el tiempo de servicio militar y encontrar un trabajo más adecuado a su pasión, según publicó Mail on Sunday.
George cumplirá 10 años a fines de mes, solo unas semanas después de haber protagonizado un papel destacado como paje de honor en la coronación de su abuelo, el rey Carlos III. Sus padres desean que tenga una infancia y una vida escolar normales junto a sus hermanos, la princesa Charlotte y el príncipe Louis. La decisión está relacionada con “la infelicidad de William” por “la manera fortuita en que todo el asunto de su destino real le había rondado la cabeza desde el principio”, según las fuentes.