El rey Carlos III (74) y los demás miembros de la Familia Real Británica están cada vez más cerca de la gran ceremonia, dónde se coronará al primogénito de Isabel II y de Felipe de Edimburgo como rey de Inglaterra, por lo que se encuentran afinando los últimos detalles del evento, en el que se romperá con una importante tradición.
De acuerdo con el diario The Mirror, el soberano invitará a la coronación que se llevará a cabo el 6 de mayo en la Abadía de Westminster a 850 héroes locales, entre los que se encuentran bomberos, cuidadores y trabajadores comunitarios, con el objetivo de mostrar su humildad y cercanía con el pueblo británico.
“Carlos III acabará con siglos de tradición al invitar a 850 personas comunes con historias extraordinarias en lugar de legisladores y pares para celebrar el comienzo de su reinado”, señaló la publicación del mencionado medio de comunicación.
Entre las personas comunes que serán invitadas estará Max Woosey, quien es un joven de 13 años que acampó en su jardín durante tres años para recaudar más de 700 mil libras esterlinas, equivalentes a más de 860 mil dólares, para apoyar a un refugio local.
Según el diario, la ceremonia del padre del príncipe William (40) está siendo llamada por los ciudadanos como una ‘Coronación del Pueblo’, para honrar a aquellos que trabajan incansablemente para ayudar a los demás. “El Rey insistió en celebrar este evento trascendental con las personas que han marcado la diferencia en sus comunidades y han hecho de Gran Bretaña lo que es hoy”, señaló uno de los organizadores del evento al medio.
Asimismo, se pudo conocer que se han enviado invitaciones a más de 450 ganadores de la “Medalla del Imperio Británico” en reconocimiento a sus contribuciones desinteresadas a la sociedad.
“Por supuesto que hay una tremenda diferencia a las tradiciones del pasado, pero esta ocasión realmente representará el mundo en el que vivimos, una ‘Coronación del Pueblo’. Cuando los ojos del mundo estén puestos en Gran Bretaña, personas como Max, que han ido más allá para ayudar a las comunidades, son la esencia de tal evento”, agregó el organizador.
Del mismo modo, The Mirror aseguró que la decisión de Carlos III para romper con el protocolo de la ceremonia, antes fue consultada con su esposa, la reina consorte Camilla (75), y con el futuro heredero al trono británico, el príncipe de Gales.