Desde su debut en pantalla y con más de 20 temporadas al aire, Kim Kardashian ha abierto su intimidad a los miles de televidentes, siendo la maternidad uno de los puntos más delicados en la vida de la celebridad, tema por el que ha derramado lágrimas en más de una ocasión.
Tras un serio diagnóstico entregado por los médicos, si la ex de Kanye West se embaraza nuevamente, podría poner en riesgo su vida. En una conversación en el podcast de Kristen Bell, "We Are Supported By", Kim reveló que padece preeclampsia y placenta accreta, motivo por el que en sus dos embarazos debió someterse a un parto de emergencia y sufrió diversas complicaciones de salud durante el proceso.
Estas afecciones de alto riesgo se originan luego de que la placenta no se desprende completamente del útero luego del nacimiento del bebé, razón por la que la madre puede sufrir desangramiento y la extirpación total del útero, e incluso morir.
Por este motivo, la influencer debió tener a sus dos hijos menores, Chicago y Psalm, a través de vientres de alquiler. Durante la conversación Kim recordó sus embarazos como la peor etapa que ha vivido: "Odié cómo me sentía, odié cómo me veía (...) estaba acostumbrada a ver a mi madre y hermana embarazadas con partos fáciles, yo no fui así".