La actriz de Hollywood Olivia Wilde (38) ha estado muy ocupada en el último tiempo trabajando en la película Don't Worry Darling, que será estrenada este mes. El filme es su primera experiencia dirigiendo y actuando al mismo tiempo, lo que ha significado todo un desafío.
En conversación con Maggie Gyllenhaal para la revista Interview, la intérprete reveló que tomó la decisión de actuar en la película luego de que la producción se quedara sin dinero para contratar a una actriz. “Fue por necesidad. Básicamente nos quedamos sin dinero y necesitaba a alguien que aceptara un salario muy bajo, pero quería que fuera alguien que entendiera el papel”, comentó.
Tras verse en esa situación, la actriz consultó con un grupo de amigos que habían estado en su lugar, quienes le recomendaron dirigir la película y actuar a la vez. “Todos dijeron: Oh, es genial”. Uno de los que le hizo la recomendación a Olivia Wilde fue Bradley Cooper (47), quien estuvo a cargo de dirigir y protagonizar Nace una estrella (2018).
El apoyo de Bradley Cooper a Olivia Wilde
Don't Worry Darling es protagonizada por el novio de la directora, el cantante Harry Styles (28) y la actriz Florence Pugh (26). A pesar de que el filme ha estado envuelto en toda clase de polémicas, el proyecto de Olivia ha logrado salir adelante y será estrenado a mediados de este mes.
El actor de ¿Qué pasó ayer? (2009) jugó un rol importante en la decisión que tomó la directora de la película. “Bradley Cooper fue un gran apoyo. Él dijo: Va a ser realmente maravilloso poder dirigir desde dentro de las escenas”, comentó Wilde.
Sin embargo, el rodaje no estuvo exento de complicaciones técnicas. “De lo que me di cuenta una vez que comencé fue que todos estos hombres habían hecho esto con zapatos cómodos, y juro que parte de eso es que yo estaba en un p*** bustier, tacones y una peluca”, aseguró Olivia Wilde.