Ya no hay mucho que hacer. El próximo sábado 6 de mayo las vidas de Carlos III y la de su nieto Archie se cruzarán inexorablemente. Ese día, el rey será coronado en la Abadía de Westminster. Ese mismo sábado, el hijo mayor del príncipe Harry y de Meghan Markle cumplirá 4 años de edad.
No se sabe por qué se eligió esa fecha precisa. Tanto la Casa Real como el Gobierno y la Iglesia fueron consultados a comienzos de año por el palacio de Buckingham para realizar la coronación el sábado 6 de mayo, dándole el visto bueno.
Nadie consideró, al parecer, que esa fecha también es la del cumpleaños de Archie, y que aquello podría entorpecer aún más la eventual presencia del príncipe Harry en la ceremonia real de la coronación.
El tope de fechas de seguro va a originar un nuevo conflicto entre los integrantes de la famlia real, toda vez que Carlos con Harry y Meghan lejos de acercar posiciones, se distancian.
En mayo próximo, además, ya estará publicado el libro con las memorias de Harry, que promete mayores antecedentes de una relación padre-hijo que no cuaja desde hace tres años, cuando la pareja del príncipe y la actriz renunciaron como miembros de la realeza y se fueron a vivir a Estados Unidos.
No sería raro encontrarse el próximo sábado 6 de mayo con dos ceremonias paralelas: la de Carlos III y la reina consorte Camila, con todos los miembros de la familia real, líderes mundiales, dignatarios y otras figuras religiosas invitados, protagonizando la coronación en el Reino Unido; y la del cumpleaños de Archie, con todos los amigos de Harry y Meghan, más sus respectivos pequeños, apagando las cuatro velitas de la torta, en la mansión de Montecito, Estados Unidos.