En los albores del amor que el príncipe Harry (38) y Meghan Markle (41) mantienen hasta hoy, una llamada durante la celebración de Halloween cambió el ánimo de la velada que hasta esa hora era perfecta. La pareja asistió a una fiesta de incógnito, pero fueron descubiertos y era cuestión de horas para que la relación se hiciera pública.
Corría octubre de 2016, cuando Meghan y Harry decidieron asistir a una fiesta de disfraces en el club Soho House de Toronto, ciudad donde la actriz se encontraba grabando Suits, por lo que era habitual que el hijo del rey Carlos III la visitara. La relación entre ellos llevaba apenas cuatro meses y todavía era un romance secreto.
Según detallan en Finding Freedom, la biografía no autorizada de los duques de Sussex, la pareja “no tenía ganas de pasar el fin de semana de Halloween escondidos, ya que había mucho que celebrar”. En el extracto publicado por Mirror, aseguran que, “cuatro meses después de empezar su relación, estaban locamente enamorados y ansiosos por participar en la diversión”.
Por esas razones decidieron ir a la fiesta organizada en el exclusivo club canadiense, pero antes compraron unas máscaras de estilo veneciano. “Lo que significaba que podrían participar de la fiesta de manera anónima y nadie sabría que estaban celebrando junto a un príncipe”, explican los autores.
Meghan y Harry se encontraron con la princesa Eugenia, quien estaba en la fiesta junto a su ahora esposo Jack Brooksbank. Mientras ambas parejas celebraban el anonimato, el príncipe Harry recibió un llamado desde el Palacio de Kensington. Uno de sus colaboradores le avisó que un periódico tenía la noticia de su relación.
Desde esa noche la pareja no volvió a tener la intimidad que mantuvo en esos primeros meses de noviazgo. Meghan recordó el episodio como su “última noche divertida” durante una entrevista con Ellen Degeneres en 2021. “Vino a verme a Toronto, nuestros amigos y su prima Eugenie y ahora su esposo Jack, también vinieron”, partió contando.
“Los cuatro nos escabullimos disfrazados de Halloween para pasar una noche divertida en la ciudad antes de que se diera a conocer en el mundo que éramos una pareja... Teníamos todos estos disfraces muy extraños y pudimos tener una última noche divertida”, recordó Markle sobre aquella noche de Halloween.