Game Of Thrones se convirtió en una de las series favoritas de muchas personas alrededor del mundo, además de una de las más exitosas de la pantalla chica, algo que trajo una gran popularidad y reconocimiento a sus actores, una de ellas fue Emilia Clarke (36), quien interpreta a Daenerys Targaryen y recientemente confesó lo traumático que fue para ella grabar algunas escenas íntimas con Jason Momoa (43).
En un principio, como parte de la historia que se narraba, la serie mostró escenas muy fuertes que involucraba violencia sexual, ya que era justamente una práctica de la época que la producción buscaba exponer un punto; sin embargo, fueron estas escenas las que hicieron que la actriz principal de la historia, que para ese entonces tenía 23 años, se sintiera incómoda, al punto de llorar.

Clarke reveló para Daily Mail que Game Of Thrones era su primer trabajo frente a una cámara, por lo que al momento de grabar las escenas de sexo con Momoa entró en pánico al no saber que hacer, pues debió desnudarse delante de todo el equipo de filmación.
“Recién salida de la escuela de teatro. Estaba aterrorizada y no sabía qué hacer. Nunca antes había estado en un set de filmación y tuve que desnudarme frente a toda esa gente y no sé lo que estoy destinado a hacer”, comentó Clarke al medio británico. No obstante, entendió que solo se trataba de un trabajo. “Recién salí de la escuela de arte dramático y lo enfoqué como un trabajo: ‘si está en el guion, entonces es claramente necesario’. Lloraba, pero me llené de valor y continué con mi trabajo”, agregó la actriz.

Asimismo, la intérprete aseguró que Jason, quien interpretaba a Khal Drogo, le ayudó para que pudiera realizar las escenas junto a él y en todo momento trató de que se sintiera cómoda, entendiendo la situación que estaba atravesando.
“Él estaba llorando más que yo. Solo ahora me doy cuenta de lo afortunada que fui con eso, porque podría haber ido de muchas, muchas, muchas maneras diferentes. Siempre decía: ‘¿Podemos conseguir su bata? ¡Está temblando!’ Fue tan amable y considerado y se preocupó por mí como ser humano”, concluyó Emilia.