El rey Carlos III y la reina consorte Camila afinan los detalles para la histórica coronación del 6 de mayo próximo, la primera en 70 años y donde el soberano tiene pensado romper con algunas tradiciones reales.
La primera de ellas es que el monarca y su esposa van a deshacerse de la ropa que ha sido clave en ceremonias anteriores. La pareja optó por no usar el uniforme tradicional que incluye medias y calzones de seda.
El nuevo soberano de Gran Bretaña usará un uniforme militar que muy probablemente sea el de almirante de la Real Marina Británica.
La pareja tendrá dos tronos nuevos hechos a la medida para que se sienten, aunque la coronación se llevará a cabo en la silla que se utiliza desde el siglo XIII y que es el mueble más antiguo del Reino Unido.
Carlos III, quien es el vigésimo séptimo monarca de la historia, prometió que se modernizarán algunas partes de la ceremonia y que habrá austeridad tomando en cuenta la crisis económica a nivel global.
La coronación del Rey se realizará el 6 de mayo en la Abadía de Westminster y durará 90 minutos. La lista de invitados será reducida, algo muy diferente al multitudinario servicio de hace 70 años de la Reina Isabel II.