Este jueves se confirmó la muerte de Lisa Marie Presley a los 54 años tras sufrir un paro cardíaco del que no pudo recuperarse. Tras el fallecimiento, surgen las preguntas sobre la herencia que la hija de Elvis dejó a las hijas que le sobreviven. La heredera del “Rey del Rock” vivió los últimos años de su vida envuelta en batallas legales y viendo diluirse el patrimonio de su famoso padre.
La fama que alcanzó el intérprete de If I Can Dream hace pensar que su hija vivió en la total abundancia. Tras haber heredado una fortuna de 100 millones y la histórica propiedad de Graceland, Lisa Marie Presley nunca logró tener un control satisfactorio del patrimonio de su padre. Murió con deudas y en la bancarrota.
Cuando Elvis perdió la vida en 1977, todo su patrimonio, que entonces equivalía a cinco millones de dólares pasó a manos de su única hija, quien solo podía recibir su herencia al cumplir 25 años. En 1994, apenas pudo acceder al dinero, se estimó que la herencia llegaba a los 100 millones de dólares. Sin embargo, su fortuna disminuyó considerablemente con el pasar del tiempo.
En 2018, Presley reveló a TMZ que se encontraba en bancarrota. Según sus palabras, la mala decisión de contratar al agente Barry Seigel esfumó su herencia. La también cantante aseguró que Seigel vendió en 2005 el 85% de los intereses de Elvis Presley Enterprises, con lo que también alejaba a la hija del artista de hacerse cargo del nombre e imagen de su padre.
Las malas decisiones comerciales también se reflejaban en la vida personal de Lisa Marie Presley, quien vio disminuir su fortuna de 40 millones de dólares a 14 mil dólares en solo algunos años, por deudas que la persiguieron hasta el día de su muerte. De acuerdo al sitio Celebrity Net Worh, especializado en calcular las fortunas de los famosos, al día de su fallecimiento, Lisa Marie tenía un valor neto de -10 millones de dólares.
La vida amorosa de la hija de Priscila Presley también ayudó a ver mermar su fortuna. Sus divorcios de Danny Keough, Michel Jackson, Nicolas Cage y Michael Lockwood le costaron altas cifras de dinero y largas batallas judiciales, que debió costear con su escasa fortuna. Con todo, la única propiedad que todavía estaba en manos de la artista era Graceland, la mansión de Elvis ahora convertida en un museo.
Aunque por lo repentino de su muerte, no existen detalles actualizados sobre el patrimonio de la artista al momento de su muerte, la propiedad ubicada en Tennessee, será la única parte del patrimonio de Lisa Marie Presley al que accederán las tres hijas que la sobreviven: Riley Keough y las mellizas Harper y Finley.