Los amados corgis de la reina Isabel II (96) continúan sorprendiendo al mundo por la manera en la que amaron su dueña. En el funeral de Estado de la monarca se difundieron las fotos de sus perros asistiendo a las calles para despedirla, y ahora se dio a conocer que Sandy y Muick estuvieron con Isabel II en su lecho de muerte.
Una fuente cercana a la familia contó al Daily Mail que los dos perros estaban en la habitación en la que falleció la reina en el Castillo de Balmoral el pasado 8 de septiembre; según el informe, Sandy y Muick también se recostaron junto a ella en la cama en la que se encontraba, y se quedaron en el cuarto hasta el último aliento de su dueña.
Tras su muerte, se supo que el príncipe Andrés y su ex esposa, Sara Ferguson, cuidarán de las mascotas. Roger Mugford, entrenador y psicólogo de mascotas, le dijo a Entertainment Tonight que los perros no sentirían tanto la partida ya que había otras personas que los cuidaban, aunque en los últimos meses la reina se involucró demasiado en la vida de sus mascotas, incluso " les permitía subirse a los muebles".
Así como ellos, quien también pasa por un duelo es el caballo de la monarca, Emma. En el funeral de Estado se encontraba presente junto a su entrenador Terry Pendry, ambos con un semblante triste que Terry percibió en Emma, y le contó al medio antes mencionado que de alguna manera sabía que Isabel II nunca más lo montaría de ahí su excelente comportamiento.
Además de la tristeza que emana de las mascotas, el príncipe Harry (38) fue otro de los que no pudo ocultar el sufrimiento que estaba viviendo por la pérdida de su abuela, incluso su esposa, Meghan Markle (41), fue fotografiada limpiándose una lágrima; el duque de Sussex era muy cercano a la madre del rey Carlos III (73) y su fallecimiento fue algo muy duro para él.