Kate Middleton (40) exhibiría esta tarde una nueva tiara, durante la recepción diplomática anual que ofrecerá el rey Carlos III en los salones de Estado del palacio de Buckingham. El mismo día en que se estrena parte del polémico documental de su concuñada Meghan Markle (41), la duquesa de Sussex, y de su cuñado, el príncipe Harry, la esposa de William podría usar otra diadema este jueves tan deslumbrante como la de la Flor del loto que lució el martes.
La princesa de Gales aprovecharía esta ocasión para ocupar otra tiara, ya que la recepción en honor a los diplomáticos extranjeros y británicos se retoma después de que se hiciera por última vez en 2019 y luego se suspendiera por la pandemia. La vez anterior que Kate utilizó una tiara fue cuando lució la denominada Lover's Knot, una de las favoritas de su fallecida suegra, Lady Di. La "tiara de los enamorados" data de 1913, cuando la reina María se la pidió a la casa Garrard, que la elaboró con diamanetes y 19 perlas colgantes bañadas en plata y oro.
La tiara de Flor del loto que utilizó el martes fue un encargo de la reina madre en 1923, quien solicitó al joyero que diseñara una diadema para sus medidas, y que contemplara diamantes y perlas de un collar que Jorge VI le había obsequiado. También denominada la tiara de papiro, fue ocupada por la princesa Isabel, como quedó plasmado en unas fotografías de la coronación de su padre, el rey Jorge VI, y también por su hermana, la princesa Margarita.
Kate ya la había empleado en la recepción a diplomáticos en el palacio de Buckingham en 2013 y para su primer banquete de Estado en el Reino Unido, durante la visita de los gobernantes de China, en 2015. Los expertos afirman que Kate Middleton no usará otra diadema real hasta el día de la coronación de Carlos III, pero sus seguidores están rogando que haya un cambio de tiara después de usar la misma bengala durante los últimos siete años.
El anillo de diamante de Meghan
Mientras Kate Middelton se lució con la tiara de Flor de loto, en Estados Unidos su concuñada Meghan Markle no quiso ser menos durante la gala Ripple of Hope, en la que estuvo acompañada de su esposo, el príncipe Harry.
La duquesa de Sussex presumió un anillo con historia, el Asprey Aquamarine, poseedor de un alto valor sentimental. La joya presenta una aguamarina de talla esmeralda flanqueada por pequeños diamantes solitarios, bañado en una banda de oro amarillo de 24 quilates
Esta ávaluado en unos 90 mil dólares y se caracteriza por las piedras preciosas visualmente más bellas. Su color azul pálido, hizo que resaltara en el atuendo de gala que lució Meghan. El anillo posee un peso simbólico muy poderoso porque perteneció a la princesa Diana, que sólo lo ocupó dos veces antes de que perdiera la vida. La duquesa de Sussex, en cambio, lo usó como un toque azul en 2018 para su matrimonio con Harry.
Para los expertos, con el color azul claro de Aquamarine, Meghan quiso transmitir simpatía, confianza y amistad, otra señal de cómo se están preparando para el estreno del documental junto a su esposo. Acaso con la misma expectación que al otro lado del Atlántico tienen al interior de la realeza británica.