Televisión

Yolanda Andrade confiesa que por culpa de Montserrat Oliver se alejó de las telenovelas

Las conductoras tuvieron un romance de 10 años y hoy mantienen una gran amistad

Aunque Montserrat Oliver y Yolanda Andrade terminaron con su noviazgo de 10 años, eso no impidió que continuarán con una gran amistad, la cual les ha permitido seguir trabajando juntas y hasta recordar los momentos que compartieron cuando fueron pareja, como sucedió esta vez en la que Andrade reveló la razón por la cual se alejó de las telenovelas.

Durante el programa Montse & Joe, en el que ambas demuestran cada semana la buena mancuerna que mantienen, Oliver lanzó un comentario con el cual ocasionó que su colega Yolanda Andrade reviviera una de las facetas de su trayectoria.

"Cuando no está actuando, le gusta ponerle drama a su vida, ella es una apasionada", dijo Montserrat. Esto provocó que Andrade confesara el porqué había dejado su carrera como actriz de melodramas.

"Hace años que no trabajo y, ¿sabes por qué no hice telenovelas? Porque (Montserrat) no quería que me besara nadie", confesó Yolanda, quien de inmediato fue interrumpida por la presentadora regiomontana: “Por mi culpa, todo es mi culpa, está bien", externó Oliver.

Fue en 1997 cuando Yolanda participó en la telenovela Los hijos de nadie, uno de sus últimos proyectos actorales en donde dio vida a Lucila Villarreal, el personaje antagónico de la trama. En esta producción, de Miguel Sabido, trabajó al lado de reconocidos actores como Silvia Derbez, Ricardo Blume y Sergio Sendel, entre otros.

A principios de este año, Montserrat Oliver recordó en una entrevista con Jorge Van Rankin cómo empezó su relación con Yolanda y lo mucho que le costó entender que se había enamorado de una mujer, pues previamente ella había estado casada con un argentino.

“Yo me enamoré de mi marido, hubo un problema, y pasa que uno tiene cierta edad y que uno no quisiera tener ese problema, conozco a Yolanda y me trata mejor que cualquier hombre con el que hubiera salido.

“Me enamoro de Yolanda, decía yo “¿Cómo es posible que me estoy enamorando de una pinche vieja si no me gustan las mujeres?.. Hasta que me dejé y dije: ¿Qué tiene que ver? Dije qué ped*, ahora resulta que me van a gustar las viejas porque este wey no hace bien las cosas…”, recordó en ese entonces la también modelo.

 

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