Este 20 de mayo, Alejandro Fernández pisará, quizás, uno de los escenarios más importantes en su carrera: la Plaza de Toros México, con todas las localidades agotadas. Y aunque es uno de los momentos más históricos en su vida, hay algo que mancha su felicidad, y es recordar lo que en el pasado le hizo Luis Miguel y por lo que no querer saber nada del intérprete.
“El Potrillo” y “El Sol”, iban a pasar a la historia de la música en México al confirmar una gira conjunta. Fue en 2015 cuando se confirmó el Pasion Tour, que llegaría primero a Las Vegas y seguiría por México y otros países de América Latina, pero esta gira jamás se concretó e incluso se dijo que fue Luis Miguel quien ya no quiso participar y con su decisión hizo perder mucho dinero a todos los involucrados.
Ocho años después, la prensa nacional cuestionó al intérprete si fue verdad que hubo una demanda en contra del famoso cantante, pues rumores aseguraron que se le pagaron más de cinco millones de dólares al Sol para garantizar los conciertos y que nunca devolvió, por lo que fue tajante en su respuesta:
“No, no sé, sí hubo un tema legal en donde yo salí ganando porque tenía todas las de ganar, y dos, no estoy, o sea, no me despierto para ver qué ching*dos hace Luis Miguel o qué pensará”, comentó en entrevista con Ventaneando, “No, no, no, le deseo lo mejor, que le vaya muy bien, y que le vaya muy bien si va a hacer otra gira con alguien más. Que Dios me lo bendiga y que la puedan hacer”, agregó.
El Potrillo tiene en la mira muchos otros planes que no incluyen al intérprete de La Bikina, además de que se enfoca en otras cuestiones más personales, de hecho, presumió en sus redes sociales que se hizo dos nuevos tatuajes en honor a su padre, quien falleció el 12 de diciembre del año pasado, al inmortalizarse las frases: “Yo no canto para vivir, yo vivo para cantar” y “No hay que llegar primero pero hay que saber llegar”.