En el universo de las luces de neón y las cámaras de Hollywood, Megan Fox y Brian Austin Green han tejido una historia que va más allá de los titulares de las revistas de chismes.
Aunque su romance ha terminado, su compromiso con la crianza de sus hijos sigue siendo una constante inmutable. Juntos, han navegado por las aguas turbulentas de la paternidad, siempre poniendo el bienestar de sus hijos en primer lugar.
Tres hijos, un vínculo eterno
Noah Shannon, el mayor, nacido en 2012, ahora tiene 11 años. Bodhi Ransom, el mediano, llegó al mundo en 2014 y tiene 9 años. El más pequeño, Journey River, nacido en 2016, tiene 7 años. Estos tres niños son el producto del amor entre Megan y Brian, un amor que, aunque ha cambiado de forma, sigue siendo fuerte.
Nuevas parejas, misma dedicación
Megan Fox ha encontrado un nuevo amor en Colson Baker, más conocido como Machine Gun Kelly. Por otro lado, Brian Austin Green ha iniciado un romance con Sharna Burgess, una profesional de “Dancing With the Stars”. A pesar de estos nuevos capítulos en sus vidas, ambos siguen centrados en la crianza de sus hijos. Burgess, en particular, ha abrazado su papel de figura maternal en la vida de los niños.
La co-parentalidad: un desafío y una recompensa
La co-parentalidad no es una tarea fácil, pero Megan y Brian han encontrado un equilibrio. Han establecido un horario de co-parentalidad que parece funcionar para toda la familia. A pesar de las demandas de sus carreras y sus nuevas relaciones, siempre se aseguran de que sus hijos se sientan amados, cuidados y priorizados.
¿Más hijos en el futuro?
Aunque Megan Fox no se opone a la idea de tener más hijos, Brian Austin Green, ya padre de cinco, ha expresado que sería un desafío logístico pensar en añadir otro hijo a su familia. Sin embargo, no descarta completamente la idea, dejando la puerta abierta a la posibilidad.