
Nassau, la capital de Bahamas, fue la ciudad elegida para que los Duques de Cambridge despidieran una gira por el Caribe que será recodara por años. El príncipe William y su esposa Kate Middleton recorrieron en su último día varios sectores de la ciudad, y cerraron oficialmente su tour en el Hotel Baha Mar, donde fueron objeto de una ceremoniosa, pero cálida, recepción, como ha sido una constante en este viaje oficial, salvo por unos incidentes aislados en Jamaica
La Duquesa de Cambridge retribuyó esa especial atención luciendo un fulgurante vestido de satén de la diseñadora Phillipa Lepley, mientras que su esposo vistió un formal y elegante blazer de terciopelo azul.

Los estudiosos de la realeza rápidamente se percataron que el vestido brillante de Kate Middleton correspondía a la colección matrimonial 2020, cuyas referencias indican que se trata de "un vestido de satén duquesa limpio con un diseño atemporal y femenino".
Los complementos de la duquesa tampoco pasaron inadvertidos, ya que el vestido lo acompañó con un cluth Hayworth de Lulu Guiness (270 dólares) y un collar y pendientes que combinaban de Van Cleef & Arpels, que ya había empleado para los Premios Bafta de hace dos años.

Fue el Primer Ministro de Bahamas, Philip Davis, quien ofició de anfitrión de los Duques de Cambridge en esta última ceremonia, donde los representantes de la corona británica disfrutaron de una presentación del Coro Juvenil de la ciudad.

La gira caribeña del príncipe William y su esposa contempló la visita a Jamaica, Belice y Bahamas.







