La súper modelo británica Kate Moss volvió a ser el centro de atención al aparecer la noche del miércoles en Nueva York para los premios anuales WSJ Innovator Awards, efectuados en el Museo de Arte Moderno de la ciudad.
Portando un vestido de color verde oliva donde transparentaba su estilizado cuerpo, Kate Moss mostró que a sus muy bien llevados 48 años, nada tiene que envidiarle a las modelos veinteañeras que desfilan por las pasarelas de europeas para las distintas Semanas de la Moda.
Una elegante capucha y un corte triangular a la altura de su tonificado abdomen, dejaron a la súper modelo, que revolucionara el mundo de las maniquíes, con la máxima distinción entre todas las figuras que llegaron a presenciar la ceremonia.
El vestido verde transparente posibilitó que luciera ropa interior de color negro en su parte inferior, mientras que la parte superior no fue cubierta por nada, salvo por la delgada tela de su vestido.
La leyenda viviente de las modelos llevaba recogido su cabello con un elegante moño, que acompañó con un par de aros de plata brillante. Sumó unos brazaletes negros y marrones en sus muñecas y otro plateado en su brazo izquierdo.
Moss mantiene su contrato con la firma Mango y no ha dejado de modelar, aunque lo hace solo para eventos muy selectivos, ya que preferentemente está dedicada a diseñar vestuario. De hecho, desde que participó en la Semana de la Moda en París, hace un mes, que no se le veía concurrir a un evento de mayor asistencia.