Camila (75) está tomando muy en serio su papel de reina consorte. Este sábado acudió a las carreras de caballos de Ascot, una de las actividades de la fallecida Isabel II y también protagonizó la más reciente fotografía publicada a través de las redes oficiales de la Familia Real en la que posó un personaje muy significativo.
La esposa del rey Carlos III (73) lució muy sonriente en la instantánea en la que se encuentra rodeada de más de mil ositos Paddington de peluche que fueron ofrendados por los británicos cuando murió la reina Isabel II, el pasado 8 de septiembre a los 96 años en su Castillo de Balmoral.
Los muñecos fueron depositados a las afueras del Palacio de Buckingham y demás recintos de la monarquía británica como muestra de cariño para la monarca que duró 70 años en el trono de Inglaterra. Ahora, estos peluches tendrán un mejor hogar, según informó la familia real en la imagen en la que Camila se observa muy sonriente mientras abraza un osito.
"Por favor cuida este oso", comenzó diciendo el posteo. "La reina consorte aparece en la foto con algunos de los 1000 osos de peluche que quedaron del homenaje a la reina Isabel, y que pronto encontrarán nuevos hogares llenos de amor con niños de @barnardos_uk", continuó.
En la publicación se explicó que tras haber retirado los juguetes de las ofrendas realizadas a la difunta Isabel II, fueron lavados para conseguir su mejor aspecto y antes de ser entregados a los nuevos dueños, quienes pertenecen a la organización benéfica de niños más grande de Reino Unido que los ayuda hasta la edad adulta.
"Actualmente, los osos están bien cuidados en el Palacio de Buckingham, Clarence House y en la guardería Royal Parks ubicada en Hyde Park", se detalló en la descripción de la foto que se tomó el pasado 13 de octubre, durante el aniversario 64 de la publicación del primer libro del oso de Paddington.
Durante el festejo por el Jubileo de Platino de la reina Isabel II, la soberana grabó un video en el que aparecía tomando el té con el famoso personaje de Paddington, por lo que al morir, miles de personas llevaron estos osos de peluche como ofrenda.