Manuel Ojeda, quien fue reconocido por su amplia carrera artística en los escenarios teatrales, televisión y cine, además de ser uno de los más destacados villanos, falleció el pasado 11 de agosto a los 81 años debido a una afección hepática, según reveló su representante, Gerardo Lucio.
La fatal noticia fue dada a conocer por un comunicado de la Asociación Nacional de Actores (ANDA); sin embargo, no precisaron las causas del fallecimiento del primer actor mexicano, por lo que horas más tardes el mánager de Manuel Ojeda ofreció detalles de los problemas de salud que aquejaron al actor durante los últimos meses.
“Su hígado ya estaba muy mal. Eso le provocaba tener ascos, náuseas y no podía comer a pesar de que yo, en varias ocasiones, le insistía en que tenía que comer”, señaló Lucio a la prensa durante el funeral del actor de la película La ley de Herodes.
Asimismo, Gerardo comentó que antes de la muerte del intérprete mexicano ya no lo veía del todo bien. “Comía muy poco, era un bocado, por eso se fue… se veía muy demacrado”. De igual forma, el representante fue cuestionado sobre el cuidado que tenía el actor, a lo que él respondió que siempre estuvo realizando chequeos para ir monitoreando su salud.
“Él siempre se estuvo cuidando, incluso, antes de arrancar Corazón Guerrero, siempre se hacía unos chequeos. En el transcurso de la novela, se empezó a sentir mal, y el buen amigo, Salvador Mejía (productor), lo ayudó, lo protegió, lo cuidó para que fueran pocas las escenas que tuviera”, manifestó Lucio.
Por otra parte, en una entrevista para el canal de YouTube, Tequila Doble, el manager del primer actor explicó que Ojeda tuvo que ser hospitalizado de emergencia hace unos días, pero todas acciones para reanimarlo no dieron respuesta positiva: “Él ya estaba un poco decaído, ya estaba un poco malito. Ingresó al hospital y ya no pudieron hacer nada por él”, declaró