Muchos de los artistas que hoy gozan de gran éxito y buena reputación dentro del mundo del espectáculo, han pasado por momentos duros en sus vidas que los han hecho crecer y ser mejor en sus trabajos. Tal es el caso de Lupita D’Alessio, quien hace poco reveló la fuerte disciplina que le aplicaba su progenitor.
Guadalupe Contreras Ramos, mejor conocida como Lupita D’Alessio, es una de las cantantes más notables en México desde la década de los 80, puesto que en 1978 ganó la edición número 7 del Gran Premio de la Canción Iberoamericana o también conocido como Festival de la OTI.
Sin embargo, no todo ha sido color rosa para Lupita, ya que en una reciente entrevista que otorgó al presentador de televisión Adal Ramones para Azteca UNO, la intérprete detalló los inicios de su carrera profesional que ya cuenta con más de 50 años.
En medio de la conversación, "La Leona Dormida" aseguró que al principio de su trayecto hacia el mundo del entretenimiento había bailado ballet clásico en San Diego y luego fue becada en una academia de baile en Nueva York, pero su padre le impidió continuar con ese sueño, ya que ella estaba destinada a ser cantante.
“Mi madre me enseñó la técnica y yo lloré muchísimo porque dije: 'nomás no hago feliz a mi papá'. Entonces no era lo que él quería”, afirmó D’Alessio sobre la petición que le hizo su padre al inicio de su carrera. De igual forma, manifestó que en ese momento, su papá le dijo que ella “no era una Pávlova”, haciendo referencia a la primera bailarina rusa Anna Pávlova.
El acuerdo que planteó con su papá, era que tenía que colaborar en el programa de variedades conducido por él, en donde además participaba toda la familia. “El Show de Poncho D'Alessio era toda la familia, así que, si no cantábamos, no comíamos” confesó la también actriz. Fue entonces que su padre le inculcó una fuerte disciplina durante su crianza para que siguiera su carrera como intérprete.
Otra de las frases que Lupita recordó fue: “Si tú no trabajas en mi programa, no hay una sopa caliente en la mesa”. Eran parte de las exigencias de su padre cuando empezó a desenvolverse como cantante. Las experiencias que vivió Lupita fueron cuando ella tenía 13 años, y formaron parte de su creación como cantante, que gracias a su perseverancia y talento ha sido reconocida.