Camilo Blanes (39), quien ha estado en boca de todos desde hace varias semanas ha llamado mucho la atención no sólo por su transformación de género y su cambio de nombre sino por su deteriorado físico y sus vicios y excesos.
Camilo Blanes, quien cambió su nombre a Sheila Devil ha compartido con sus más de 38,4 mil seguidores en Instagram su nuevo estilo de vida que ha hecho saltar las alarmas sobre su estado de salud, ya que constantemente se le ve de fiesta, consumiendo sustancias ilegales y abusando del alcohol.
Otro aspecto que ha llamado mucho la atención es el estado actual de la mansión que le dejó su papá en Torrelodones Madrid ya que en las fotos que comparte en sus redes sociales se ve siempre la propiedad llena de basura y con los muebles muy deteriorados.
Se especula que los problemas de adicciones y salud mental de “Camilín” comenzaron con la muerte de su papá Camilo Sesto en septiembre de 2019, cuando estaba por estrenar un disco homenaje a su progenitor.
La mamá de Blanes, la mexicana Lourdes Ornelas ha externado su preocupación por su hijo, ya que no la deja entrar a su casa y afirma que tiene comportamiento errático, usa pelucas y ha comenzado un proceso de hormonas que ha comprado sin supervisión médica en el mercado negro.
Anteriormente estuvo hospitalizado casi dos meses por una neumonía, lo que ocasionó una severa pérdida de peso y debilidad en los músculos, lo que no ha contribuido a su apariencia física, ya que también se le ha visto con la dentadura completamente deteriorada.
Hasta el momento Camilo Blanes ha negado estar mal, y asegura que está cumpliendo el sueño de ser mujer, sin embargo sus publicaciones tienen muy preocupados a sus familiares y amigos, quienes lo quieren ayudar.