Georgina Rodríguez acepta una cena de reconciliación con su suegra

Los tensos momentos que Georgina Rodríguez (29) y la madre de Cristiano Ronaldo (38) vivieron en los últimos meses quedaron en el pasado. Un medio español asegura que Dolores Aveiro (68), la progenitora del deportista, viajó hasta Arabia Saudita para reencontrarse con su hijo y, a pesar de que no le habló a su nuera durante varios días, lograron una reconciliación en un lujoso restaurante.

“La madre de Cristiano Ronaldo ha sido una suegra muy complicada para todas las parejas de su hijo, pero Georgina ya se ha plantado y no va a permitir que la madre de su chico esté metida en los asuntos personales de su casa y su familia”, revelaba en noviembre de 2022 el programa español Fiesta sobre la molestia de la modelo por el actuar entrometido de su suegra.

La distancia que se mantuvo por varios meses, y que testigos apuntan a que se debió a la influencia que intentó tener Aveiro al interior de la casa de su hijo, llegó a su fin el pasado fin de semana gracias a la intervención de Hugo Aveiro. El hermano mayor de Ronaldo viajó junto a su madre hasta Riad para interceder en la reconciliación.

De acuerdo con Look, el miércoles de la semana pasada Aveiro voló hasta la capital saudí para visitar a su hijo. El plan que estaba previsto para el cumpleaños de Ronaldo debió posponerse debido a problemas con la visa. Cuando estuvo en Medio Oriente, el hermano del futbolista comenzó a realizar gestiones para unir a su madre y su cuñada.

Según el medio, Ronaldo le pidió ayuda a Hugo Aveiro para lograr una reunión entre las partes. Sin embargo, durante los primeros días ninguna quiso dar su brazo a torcer y Dolores, revelan, se encontraba con su hijo y su nieto mayor en el hotel Four Season de Riad, sin intenciones de hablar con Georgina.

El viernes 17 de febrero el Al-Nassr de Cristiano Ronaldo jugó un partido contra el Al Taawon y contó con la presencia de su madre en las tribunas, aunque Georgina no quiso participar del encuentro como en otras oportunidades. Casi sin esperanzas, Hugo Aveiro organizó una cena familiar para la noche del sábado y, sorpresivamente, Georgina y Dolores aparecieron en el lugar.

La reunión, que unió a las dos mujeres más importantes en la vida de Cristiano en la misma mesa, transcurrió en un lujoso restaurante de comida europea. Según Look, la cena transcurrió con normalidad y el trato entre la suegra y su nuera fue de total cordialidad, dando un nuevo paso en la relación y llevando el amor que ambas le tienen al portugués por delante de sus naturales diferencias.