Celebridades

La Reina Isabel II nunca supo que su bisnieta se llamaría Lilibet

Si bien el Príncipe Harry le dijo a su abuela que le pondrían el nombre de ella a la pequeña, siempre pensó que sería Elizabeth y no su apodo Lilibet.

La Reina creía que Harry y Meghan nombrarían a su hija Elizabeth y no Lilibet. La soberana recibió una llamada telefónica del duque de Sussex donde le dijo que "le colocaremos tu nombre" y se sorprendió cuando se reveló su elección, según afirmó un amigo y diseñador de interiores de la realeza.

El socialité Nicky Haslam, cuyos amigos reales van desde la duquesa de Cornualles hasta el príncipe Michael de Kent , hizo la increíble afirmación en un podcast reciente en el que insistió en que los Sussex deberían haber llamado a su hija menor Doria.

Haslam alegó que la Reina tenía la impresión de que la niña, que nació en junio pasado, se llamaría Isabel (Elizabeth en inglés), y se sorprendió al descubrir que la pareja la había llamado Lilibet.

Haslam dijo: 'Escuché que [Harry] la llamó y dijo: "Queremos llamar a nuestra hija como tú, abuela". Ella dijo: “Qué encantador de tu parte, gracias”, pensando que sería Elizabeth. Obtuvieron el permiso, pero no dijeron el nombre'.

Hablando en el podcast "The Third Act", Haslam continúa preguntando por qué Harry y Meghan no nombraron a la bebé como la madre de la ex actriz estadounidense. "¿Por qué diablos no llamaron a ese bebé Doria?" Y agregó: "Es el nombre más bonito de la historia".

El misterio ha rodeado la decisión del duque y la duquesa de Sussex de llamar a su hija Lilibet desde que el corresponsal real de la BBC, Jonny Dymond, afirmó el año pasado que no le preguntaron a la Reina si podían usar el apodo con el que la llamaba su familia.

En respuesta, los Sussex lanzaron un ataque legal sin precedentes contra la BBC, diciendo que la historia era "falsa y difamatoria".

Un portavoz de la pareja avecindada en California dijo: "El duque habló con su familia antes del anuncio. Su abuela fue el primer miembro de la familia al que llamó. Durante esa conversación, compartió su esperanza de nombrar a su hija Lilibet en su honor. Si ella no hubiera dado el apoyo, no habrían usado el nombre".

Ahora, Haslam, un amigo de la realeza, se ha sumado al misterio de lo que dijeron o no en la conversación telefónica con la monarca.

Lilibet tiene importantes connotaciones sentimentales para la Reina Isabel II porque era el nombre que su padre, Jorge VI, y su difunto esposo, el príncipe Felipe, usaban en privado para nombrarla.

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