La cantante reapareció la noche del sábado en Los Ángeles para exhibir una nueva línea de maquillaje, parte de su marca de cosméticos Fenty Beauty, uno de sus emprendimientos comerciales a los que más tiempo le ha dedicado en los últimos años.
Rihanna fue recibida por un centenar de seguidores que habían recibido invitaciones personalizadas especiales para que acudieran al lanzamiento de la nueva línea, que como en las ocasiones anteriores conserva una clara orientación hacia la masividad.
La artista de Barbados, según quienes ha seguido su evolución desde que está embarazada, ha mantenido su estilizada figura en consideración a su estado, marcando tendencia con su vestuario y con la intención de continuar con total normalidad conservando los cuidados propios de quien espera un bebé. Anoche, incluso, saludó graciosamente al público que la esperaba moviendo su torso superior para felicidad de los asistentes.
Con una falda larga de lentejuelas plateadas y un top "cut out", siguió la tendencia que ha mostrado en sus pasos por las semanas de la moda europeas. Esta vez, eso sí, no estuvo acompañada de su pareja y padre de su futuro hijo, el rapero Asap Rocky.