El estrés causado por la disputa del Príncipe Harry y Meghan Markle con la familia real tuvo un efecto perjudicial en la salud de la Reina Isabel II en sus últimos meses de su vida, según fuentes reales que lo informaron a "The Sunday Mail".
La revelación se produce un par de días después de que los duques de Sussex completaran la entrega del documental "Harry & Meghan" en Netflix y lanzaran nuevos ataques en contra de la realeza.
Fuentes de Palacio han confidenciado el real costo que tuvo para la soberana el llamado Megxit.
Una fuente cercana a la soberana dejó en claro que la salud de Su Majestad no era de las mejores y estaba empeorando, pero que el Megxit "realmente afectó la salud de la Reina".
"Tuvo un efecto perjudicial en su salud. Sí, era mayor y había otros problemas con eso pero, sin embargo, todas las afirmaciones de Harry y Meghan ciertamente contribuyeron a eso", dijo la fuente.
Agregó el informante que “estoy tan contento de que la Reina no esté presente para escuchar todo sobre este último documental. Es todo lo contrario al deber, la unidad y el sacrificio: todo aquello en lo que fue criada para creer y que encarnó".
El certificado de defunción de Isabel II explica que murió de "vejez". Pero los allegados a la monarca, fallecida el 8 de septiembre pasado a los 96 años, creen que sus frecuentes problemas de movilidad se vieron incrementados por el estrés añadido por Meghan y Harry.
Según los cercanos, la salud de la monarca estaba fallando y dijeron que el último año de su vida fue particularmente agotador, especialmente después de contraer covid-19 en febrero pasado.