Jacques y Gabriella de Mónaco se asomaron al balcón del palacio real como las celebridades que son. A pesar de la corta edad de los mellizos -8 años-, los hijos del príncipe Alberto (64) y de la princesa Charlene (44) lentamente se comienzan a ambientar a ciertos protocolos que le exige el rol que ostentan, y parece que lo están haciendo con mucha dedicación.
La asociación con los hijos de los príncipes de Gales, William y Kate, fue inmediata. Contemporáneos de los dos mayores, Jorge (9) y Charlotte (7), y algo mayores que Louis (4), los mellizos han comenzado a tener una exposición mediática conforme a su crecimiento.
El ejemplo de este fin de semana en los festejos del Principado de Mónaco evidencian la intención de incorporarlos a mayores actividades. Siempre en la compañía de sus padres, los mellizos tienen varias similitudes con la complicidad que han mostrado Jorge y Charlotte.
Ambas parejas de hermanos, pese a la corta edad, asumen con una asombrosa seriedad las actividades protocolares, y así como los pequeños príncipes británicos mantuvieron en todo momento la compostura durante el largo funeral de la reina Isabel II, este sábado la conducta de Jacques y Gabriella durante el desfile fue impecable, llenándose de elogios por su disciplina.
Mellizos de Charlene protagonistas del Día Nacional de Mónaco
Este sábado, en el Día Nacional de Mónaco, el tradicional desfile institucional fue el plato fuerte de la celebración. En el marco de las actividades, la realeza encabezó una serie de ceremonias que ya son parte de una historia centenaria. Y allí, tanto Jacques como Gabriella, lucieron sus elegantes atuendos oficiales.
Gabriella se colocó un perfecto abrigo rojo con un sombrero negro, accesorio que solo le duró los primeros minutos de la ceremonia, porque luego no se le vio más.
Jacques, en cambio, lució un uniforme oficial del ejército monegasco, con una gorra que ocupó casi todo el acto. El pequeño varón exhibió un notable conocimiento de los distintos destacamentos, y sus saludos, siguiendo los modos de su padre Alberto, fueron ceremoniosos y llenos de respeto.
Los hijos de Alberto y Charlene fueron parte central de la comitiva oficial de la Casa Grimaldi, donde también destacaron Carolina (65), la hermana mayor del príncipe, y Estefanía (57), la menor.