Brian Warner mejor conocido como Marilyn Manson ha sido señalado por varias mujeres de abuso sexual. Las acusaciones comenzaron a inicios de 2021 cuando la actriz Evan Rachel Wood, que fue su pareja sentimental durante algún tiempo, alzó la voz y reveló que Manson había abusado de ella. Desde entonces una gran cantidad de víctimas han dado a conocer lo que les sucedió en manos de Marilyn.
La revista Rolling Stones recogió el testimonio de 55 mujeres y de las entrevistas llegaron a la conclusión de que todas habían sido encerradas en el mismo cuarto de tortura.
La revelación ha causado gran impacto ya que todas coincidieron en que fueron privadas de su liberad, violadas, mutiladas y humilladas por el cantante dentro de este sitio al que llaman "El cuarto de las chicas malas". Los abusos se dieron entre 2007 y 2010, en este periodo quienes fueron víctimas detallaron las características de esa habitación.
El lugar era una cabina de grabación, las cuales están diseñadas para no permitir la entrada ni salida de ruido, así se puede grabar en completo silencio, además lo que se grababa en este cuarto era música electrónica y se requiere de más instrumentos tanto musicales como de tecnología computarizada.
La modelo Ashley Morgan reveló que fue en este lugar donde Manson la drogaba para mantenerla despierta y en una ocasión el artista realizó un pacto de sangre en el cual le cortó el vientre a la modelo y bebió de su sangre, además obligó a Morgan a hacer lo mismo con él.
Se sabía que este lugar ubicado dentro de la residencia del intérprete de Sweet dreams existía, pero nunca se reportó que hubiera alguien en cautiverio ya que de acuerdo con un ex manager llamado Ryan Brown, nunca había visto a alguien encerrada ahí, y fue Brown quien comentó que tanto la disquera como otras personas que colaboraban conocían el cuarto.
Sobre el resto del departamento algunas víctimas relataron que era lúgubre y frío puesto que la temperatura debía mantenerse a 18 grados centígrados porque así lo ordenaba Marilyn, además la decoración se basaba en símbolos nazis y manchas que parecían sangre; las camas y las sábanas eran de color negro.